UN VINO CON RESPETO Y LIBERTAD

Teresa Páramo Arroyo fue la encargada de presentar un vino de Ribera de Duero ecológico,  elaborado como ella apunto “a mano, despacio, seleccionando el fruto con mimo y paciencia castellana. Cajas de quince kilos llenas de uva tempranillo que estarán en la bodega en menos de dos horas”.

Nos habló de su bodega, que es la más antigua de la zona, que todo su campo es ecológico, y del terruño.

 Y que este ERAMUS es un vino joven, natural  elaborado sin añadir ni al fruto ni al proceso más que el cariño y el tesón de toda una familia, los hermanos Páramo Arroyo vuelven a demostrar que es posible disfrutar de un D.O. Ribera del Duero sin sulfitos añadidos y que en nuestra boca solamente tengamos la sinfonía frutal de un alimento vivo y natural.

Las Bodegas Páramo Arroyo tienen 40 hectáreas de viñedos de los que obtienen unas 110 mil botellas, la mayoría de ellas salen fuera de nuestro país, siendo Suiza su mayor mercado.

 

En cata el vino de un color rojo guinda, me resulto en nariz, fuerte de alcohol, tiene según bodega 14,5%, pero creo que tiene algo más, con presencia de melocotón y cereza, y en boca un regusto amargado que dura poco y que resulta agradable, fácil de beber con moderación.

 

 Para la propietaria con sus hermanos de la bodega  este es “la clase de vino que habrían bebido nuestros abuelos en uno de los lugares donde, probablemente, estuvieron”.